Parmigiana (berenjenas a la parmesana)
- Ingredientes
- Preparación
- Notas
- 4 berenjenas grandes
- Sal y pimienta
- 1 cebolla y 1 diente de ajo (ambos picados finos)
- 80 ml de aceite de oliva
- 50 g de concentrado de tomate
- 2 latas de tomate pelado (en trozos)
- 100 g de harina para rebozar
- 1 diente de ajo (pelado) y aceite de oliva para la fuente
- 4 bolas de mozzarella (escurridas y cortadas en rodajas finas)
- 120 g de parmesano rallado
- ½ manojo de albahaca fresca (hojas en tiras finas)
-
Preparar las berenjenas:
Lava y seca las berenjenas, córtalas en rodajas de 1 cm de grosor. Colócalas sobre papel de cocina, espolvorea con sal y deja reposar unos 20 minutos para que suelten el agua. -
Salsa de tomate:
Sofríe la cebolla y el ajo en una olla grande con un poco de aceite de oliva durante 3–4 minutos. Añade el concentrado de tomate y cocina 1–2 minutos más. Incorpora los tomates troceados, salpimienta y cocina a fuego medio unos 10 minutos. -
Freír las berenjenas:
Seca las rodajas de berenjena, rebózalas en harina y fríelas por tandas en una sartén con aceite de oliva durante 3 minutos por cada lado, hasta que estén doradas. Déjalas escurrir sobre papel de cocina. -
Montar el gratinado:
Frota una fuente para horno con el diente de ajo y úntala con aceite de oliva. Cubre el fondo con 3 cucharadas de salsa de tomate.
Coloca 1/3 de las berenjenas en capas, añade 1/3 de la salsa de tomate, parte de la albahaca, 1/3 del parmesano y 1/3 de la mozzarella.
Repite las capas dos veces más, terminando con queso. -
Hornear:
Hornea a 200 °C (calor arriba y abajo) durante 30–35 minutos, hasta que esté dorado y burbujeante. -
Servir:
Deja enfriar un poco antes de cortar en porciones.
Disfruta la parmigiana con pan focaccia.
La parmigiana sabe aún mejor templada o recalentada al día siguiente.